El proceso de secado en
lechos fluidizados, constituyen hoy en día, una alternativa
eficiente para la deshidratación de productos.
Este proceso se lleva a cabo, gracias a la transferencia de calor
y masa que se realiza dentro del equipo, posibilitadas por el contacto
intimo que tiene el producto con los gases de secado dentro del lecho
fluidizado.
En secaderos de lechos fluidizados continuos, la alimentación
se realiza por el extremo superior del lecho, la misma cae y se pone
en contacto con una corriente de aire caliente, produciéndose
de esta forma la fluidización y evaporación. Luego es
transportada neumáticamente hacia una segunda zona, en donde
el polvo es enfriado, obteniéndose en el proceso global una
aglomeración parcial del polvo y consecuentemente la modificación
de las propiedades iniciales.Debido a los altos coeficientes de transferencia
térmica logrados con este proceso, se puede ubicar al secadero
de lecho fluido continuos como un equipo de tiempo de residencia media,
permitiendo la deshidratación de productos termo sensibles.
Este proceso es muy difundido para productos que requieren, una disminución
limitada de humedad y definidas propiedades granulométricas.
En cambio en los secaderos fluidizados discontinuos, el producto a
deshidratar debe ser apto para soportar grandes tiempos de residencias.
Para ambos casos, el calor intercambiado depende de la humedad del
producto a procesar y tanto la temperatura del gas como la altura
del lecho, pueden ser variadas compatibles con el diseño del
equipo.
Aplicaciones:
Leche (Secado final) Levaduras Snack Enzimas Suero de quesería (secado final) Aromas (secado final) Productos opoterápico